Si la señal de SpO2 es débil, puede significar que la perfusión del sitio de medición es demasiado baja.
Para optimizar la calidad de la medición recomendamos:
Inspeccionar el sitio donde está colocado el sensor cada dos a tres horas para asegurarse la correcta posición (el sensor óptico debe estar alineado sobre la uña del paciente).
Cambiar el sitio de aplicación como mínimo cada cuatro horas en pacientes adultos. Para recién nacidos, cambiar el lugar de medición cada 20 minutos.